Este jueves el observatorio de la epidemia de la Unión Europea aportaba unas cifras alocadas, fruto del descontrol de la epidemia. Algunos países, como Bélgica o Chequia, admiten que la situación está disparada y fuera de su control.
Hace apenas tres semanas, España, con 320 nuevos casos de Covid 19 por cada cien mil habitantes, triplicaba a todos y cada uno de los demás países de Europa. Francia, que era el país más cercano a nuestro desastre, tenía apenas 100 casos. Y todos los demás estaban por detrás.
Para España tampoco hay consuelo: después de una bajada a 299 casos hace una semana, las cosas han vuelto a empeorar y hoy estamos en 360 casos. Pero ya no somos el país más infectado. Hoy, Chequia supera los mil casos; Bélgica está en los 932 y Holanda está en los 600. Situación caótica.
Durante meses, Italia tenía una situación aceptable, con 30 o 40 casos, pero esto se ha perdido y ya hoy llega a los 191. Incluso la siempre controlada Alemania, que durante meses estuvo en los 30 casos, este jueves rozaba los cien.
Francia (453) y Reino Unido (367), también van mal. Polonia, que con Alemania mantenía un cierto control, llegó ayer a los 251, como Rumanía o como Irlanda. Eslovaquia (347), Eslovenia (425), Malta (320) o hasta Luxemburgo (415) presentan cifras preocupantes. Nadie se libra de la pandemia, excepto Noruega (37) o un poco peor (55), Finlandia.
Los primeros criterios para considerar un país seguro establecían en 50 casos el límite de lo aceptable. Hoy, sólo Estonia y Noruega cumplirían con este criterio en toda Europa y en la mayor parte de los cosas multiplicarían entre 10 y 20 veces aquel indicador.
La reanudación del turismo interior está, pues, absolutamente fuera del horizonte.
El Gobierno irlandés ha decretado este lunes la máxima alerta del plan contra la pandemia, que insta a la ciudadanía a quedarse en casa y cierra los bares, restaurantes y comercios no esenciales, aunque mantiene abiertas las escuelas y guarderías. Este confinamiento, menos estricto que el impuesto durante la primera ola, entrará en vigor este jueves y durará seis semanas, con vistas a levantar progresivamente las restricciones hacia principios de diciembre para dar un respiro a la economía de cara a las Navidades.
Baviera lanza un desesperado intento por frenar al coronavirus
La pequeña localidad bávara de Berchtesgadener Land se ha convertido en la zona con mayor cantidad de contagios por 100.000 habitantes en toda Alemania. Todo comenzó con una fiesta.
Las autoridades de Baviera decidieron tomar drásticas medidas para frenar el escalofriante aumento de los casos en el distrito de Berchtesgadener Land, en el sur de Alemania. Básicamente nadie podrá salir de sus casas sin una razón justificada. Se trata de un intento desesperado por controlar una situación que parece estar saliéndose de su cauce. La localidad tiene una tasa de contagios de 272 por cada 100.000 habitantes, por lejos el récord del país. La medida regirá por 14 días desde el pasado 20 de octubre.
Nuevas restricciones en la región de Lombardía. El Gobierno de Italia y las autoridades locales han alcanzado un acuerdo, según ha informado un portavoz del Ministerio de Sanidad. La región solicitaba un toque de queda de 23.00 a 05.00 a partir de este jueves, unas medidas que afectarían a ciudades como Milán y Bérgamo.
Italia también impuso restricciones a partir de este lunes en bares y restaurantes, actividades deportivas o ferias populares, muy abundantes en el país. "No podemos perder el tiempo", dijo el primer ministro Guiseppe Conte.
El país parecía haberse librado de la crudeza de la segunda ola de infecciones, pero desde principios de mes registra un alza importante de los contagios.
La República Checa cierra bares, restaurantes y colegios hasta noviembre
El Gobierno de la República Checa ha decretado este lunes el cierre de todos los colegios, bares y restaurantes hasta el 3 de noviembre, entre otras restricciones con el objetivo de reducir los contagios por coronavirus. El país checo es el más afectado de Europa con casi 500 contagios por cada 100.000 habitantes en 14 días, por delante de Bélgica (402,5) y España (308,1).
Según informa El Periódico, el reciente crecimiento exponencial de los contagiados ha hecho que el Gobierno endurezca las medidas durante el resto del estado de emergencia, que finaliza el día 3 de noviembre.
Hasta ahora, las escuelas estaban siguiendo un sistema que combinaba las clases de manera presencial y a distancia, pero el Gobierno ha decidido clausurar todo el sector de la educación hasta el 2 de noviembre.
En el caso de los bares y restaurantes, quedarán cerrados, aunque los restaurantes podrán seguir sirviendo comida para llevar a través de una ventanilla, al igual que durante la primavera. Además, se prohíbe el consumo de alcohol en las calles.
Otra de las medidas que entra en vigor es la limitación a 6 del número de personas que pueden reunirse al aire libre y el uso obligatorio de la mascarilla en los andenes de las estaciones de transporte público.
Bélgica echa el cierre y activa el toque de queda
Bélgica es el segundo país con mayor tasa de incidencia de Europa. Se han duplicado las hospitalizaciones y la capacidad de test está desbordada. Esta noche ha habido ya toque de queda en todo el país. Desde la media noche hasta las cinco de la mañana.
Todas las terrazas de los bares están recogidas y todos los locales cerrados. Así van a estar al menos durante un mes. Unas medidasque el primer ministro reconoce "injustas" para algunos y por eso libera 500 millones de euros en ayudas para los hosteleros. Pero el cierre es necesario porque los contagios en Bélgica siguen disparados.